Desde hace varios años ya, el deporte de la Pesca con mosca a tomado una afición desmesurada en la población Argentina. La Patagonia, su máximo exponente para practicar este deporte, tanto por sus míticos paisajes y calidad de especies tanto de Trucha como de Salmones es el destino de cualquier pescador con mosca u cualquier otra Modalidad, ya sea Nativo u extranjero.
Las aguas cristalinas que bajan desde la cordillera hasta el Océano Atlántico Sur, son el paraíso para practicar estos deportes. Una Realidad actual, es que es prácticamente imposible acceder tanto a Ríos como Lagos y a su vez algunos de ellos están muriendo. La primera, es la privatización de sus costas, por medio de la construcción de Lodges para extranjeros que muchas veces restringen sus puertas a pescadores nativos, ya sea por sus altos costos o por políticas de las empresas, y a su vez, como segundo factor, la Construcción de Represas y Presas; que por un mal manejo de los Caudales, están matando la biota interna de los ríos y la Fauna, haciendo desaparecer tanto a plantas, insectos y animales que alli lo abitan, dejando un lecho sin Vida.
La Provincia del Neuquén posee uno de los rios más importantes de la pesca en el Mundo, el Limay. Su traducción del Mapuche es «Reflejo de Agua Clara», característico desde su naciente en el Lago Nahuel Huapí, con una extensión de casi 500 km, hasta la ciudad de Neuquén, es la principal atracción de pesca de la Provincia. Desde la construcción de Represas en su cause, «el Reflejo de Aguas Claras» ya no es el mismo que hacen 40 años atrás. La necesidad de Satisfacer el consumo mediante la energía Hidroeléctrica ha llevado a que se lo trate como un Elemento ( Agua solamente) y no como un Ecosistema. Caudales continuos por largos periodos de 115 m3, que en cuestión de minutos llegan a tener 1000m3 y vuelven a bajar, hacen que durante estas fluctuaciones de Caudal, todo lo que habita allí dentro queden atrapados en las riveras y lagunas y mueran. Estudios Ambientales han revelado que el efecto de las variaciones bruscas de caudal y el no cumplimiento de las erogar las cantidades mínimas de agua para que el río mantenga su vida, va a generar la perdida del ecosistema, y los entes encargados del buen manejo del recurso, no hacen nada al respecto.
Si a todo esto, le sumamos que La privatización de sus costas, y las tendencias a gestionar «Cotos de Pesca» nos demuestra que el río «No es de todos» y «todos no podemos cuidar el Rio», haciendo que el deporte desaparezca de la región y a su vez no solamente para los propios pescadores, sino que para cualquiera que quiera visitar sus Aguas o practicar cualquier otro deporte. Actualmente de esos casi 500km de río muy pocas estancias todavía permiten su Acceso, que representarían casi 50 km del mismo. El resto, muy pocos afortunados pueden conocerlos, ya que el único acceso es mediante balsas o embarcaciones. Es muy triste como pescador de hace años, ver como limitan a todo el mundo poder ver y estar, en un lugar que es patrimonio de todos. Ya tenemos como ejemplo Tierra del Fuego y gran parte de Santa cruz que es inaccesible tanto a ríos como lagos por la construcción de Cotos de Pesca y Lodges.
Claros ejemplos son los campos adquiridos en nuestra provincia por capitales extranjeros, cierran sus puertas para que nadie entre y como sabemos todos, el Agua es el Oro del futuro y que por una explotación exclusiva, Lo nuestro no sea nuestro. Hay leyes como el «Camino de Sirga» Art. 2369 del Código Civil Argentino dice claramente;»los propietarios limítrofes con los ríos o con canales que sirven a la comunicación por agua, están obligados a dejar una calle o camino publico de 35 metros hasta la orilla del río o del canal, sin ninguna indemnización. Los propietarios ribereños no pueden hacer en ese espacio ninguna construcción ni reparar las antiguas que existen, ni deteriorar el terreno en manera alguna.», no sea respetado en su jurisprudencia y las autoridades no hagan nada al respecto y encima se ponga un precio por intereses públicos como privados al ingreso de los mismos.
Podemos decir como conclusión, que el río, el deporte y el turismo nacional se mueren y las Ilusiones de pescar de cada uno de los argentinos que amamos nuestra patria, cada vez se ven reflejadas en puros pensamientos y no en realidades concretas. El Estado, debe garantizar el uso de los ríos y lagos y a su vez, ser declarados de Interés publico, dado que miles de personas por fin de semana los utilizan para esparcirse. Lanzando a su vez campañas de control y concientización del buen uso del Recurso.
Matias Fernandez Carro